Ha sido una semana muy intensa, y la próxima lo será más, pero a la vez muy serena y alegre.
El pasado jueves, 9, más de medio centenar de personas participaban en un funeral por Iñigo Babot en la iglesia de El Espíritu Santo de Madrid.
Agradezco mucho todas las muestras de cariño que nos están llegando de todas partes del mundo y que puntualmente transmito a su familia. He hablado dos veces esta semana con sus padres y están muy emocionados por tantos mensajes de condolencia.
De memoria les cuento: Adam, un gran amigo desde Estados Unidos, mensajes de Javier y Sergio desde Chile, de Carlos de Brasil, de Cristián, Juan, Verónica y Bettina desde la Argentina, de Ecuador, Costa Rica. Anna, una chica que no conozco me informa que vendrá desde Polonia para rezar ante la tumba de Iñigo Babot en el cementerio de Les Corts de Barcelona.
En el grupo de AEFOL en Linkedin todos los mensajes son muy bonitos. José Antonio ha escrito un precioso artículo en su Blog que reproducimos en www.aefol.com. Juan Carlos vendrá desde Vlladolid a Madrid a rendir un pequeño homenaje. María Jesús organizó la Misa en Madrid, a la que fueron Paco desde Salamanca, Fernando, Ruth, Pepe, Germán y muchos otros amigos y amigos de Iñigo. Sigo recibiendo mensajes que me llegan por muy distintas vías: red Iris, grupo DiM, Twitter, Facebook, Linkedin, web.
La noticia IN MEMORIAM con lazo negro que publicamos en www.aefol.com ha sido la más vista de toda la historia de nuestra web que va por los 11 años, con más de 1.891 visitas.
¿No es impresionante? Yo soy el primer maravillado por tantas muestras de cariño y doy a gracias a Dios.
Le hemos dedicado el próximo EXPOELEARNING, él el pasado año nos dedicó un vídeo que se puede ver en nuestras webs y en AEFOL.tv www.aefol.tv y nosotros le vamos a dedicar el XI Congreso donde el próximo miércoles, 22 de febrero hubiera tenido que impartir una ponencia, moderar una mesa redonda e impartir un taller sobre podcast. Les he pedido a los ponentes que hagan un esfuerzo en esmerarse y tenemos alguna sorpresa reservada que no desvelaré de momento.
También me han anunciado desde el IESE que nos ceden una sala para celebremos el homenaje académico que dice le íbamos a hacer. Se lo agradezco mucho porque es algo extraordinario, pero Iñigo tenía un enorme cariño por esa Escuela, tanto es así que quiso le enterraran luciendo la corbata del IESE.
Yo me pongo el último en toda esta impresionante muestra de hondo, sincero y auténtico cariño por el amigo, por el maestro, por el profesor. Y me pongo al servicio de todos, sobre todo de su familia, para organizar un gran homenaje antes del verano o después, que sirva con más tiempo y serenidad poner en común todo lo que hizo por el mundo de e-learning y escuchar a tantos como quieran expresar sus sentimientos.